En pánico por la marcha, los jueces de Comodoro Py debatían entre hacer home office o poner francotiradoresEn pánico por la marcha, los jueces de Comodoro Py debatían entre hacer home office o poner francotiradores

Los jueces de Comodoro Py entraron en pánico el martes por la mañana, cuando se percataron de la magnitud de la manifestación que preparaba el peronismo para acompañar a Cristina Kirchner hasta los tribunales, donde debían notificarle su detención. Fuentes judiciales revelaron a LPO que, durante la reunión de Superintendencia de la Cámara de Casación, los magistrados del máximo tribunal penal evaluaron una disposición para que los empleados realicen sus tareas laborales bajo la modalidad de home office.
La alienación de los camaristas frente a la caravana que planificaban los seguidores de la exmandataria fue tal que hasta discutieron sobre la conveniencia de colocar francotiradores en el vetusto edificio de Retiro.
El presidente de la cámara, Daniel Petrone, informó a sus pares que había recibido un oficio de parte del juez Jorge Gorini, titular del tribunal oral que condenó a la expresidenta, advirtiendo que los días 17 y 18 de junio se harían efectivas las detenciones en la causa Vialidad y requería «medidas de seguridad suficientes».
Las autoridades de Comodoro Py se pusieron en contacto con Policía Federal y Policía de la Ciudad. Hasta el ministro de Seguridad porteño, Horacio Giménez, se comunicó con el secretario general de la Cámara, Juan Manuel Montesano Rebón, para interiorizarse y lo propio hicieron funcionarios del gobierno nacional.
Cristina: «Este modelo se cae y el poder económico lo sabe, por eso estoy presa»
Un camarista le dijo a LPO que, tras el anuncio de que la movilización se haría hacia Plaza de Mayo, «lo único que importaba era que la marcha no era en Py». «Caído lo de (Ariel) Lijo, no hay referencia que haga bisagra entre política y Justicia, el gobierno (Sebastián Amerio) no tiene mucha más llegada que sobre Mariano Llorens», argumentó, y también alertó que el ministro Mariano Cúneo Libarona «está pintado y el resto, cada cual hace la suya».
El nerviosismo era tan fuerte que el comisario mayor Gonzalo Pelacchi, responsable de la PFA, garantizó la instalación de «una unidad de avanzada en el exterior» de Comodoro Py. El jefe de Custodia y Seguridad del edificio, Jorge Hermida, informó por su parte a los magistrados que contaban con refuerzos desplegados, dos camiones celulares y el apoyo del Grupo Especial de Operaciones de la Policía (GEOP), que había concurrido para inspeccionar las instalaciones durante el fin de semana.
Pero el terror de los jueces no se habría detenido en ese punto. En los pasillos de tribunales, comentaron a LPO que la jueza Angela Ledesema se manifestó contra el despliegue de snipers (francotiradores) y que los uniformados desfilen por Comodoro Py portando sus armas. Prevaleció la cordura y sus pares aceptaron el planteo.
Un fiscal al tanto de lo que discutieron los camaristas le dijo a LPO que el juez Carlos Mahiques expresó su preocupación por el hecho de que en la ciudad bonaerense de Mercedes aparecieran volantes agraviantes contra él y sus hijos, por la detención de Cristina. Esa acción de agitación política se habría producido en la puerta de la escuela de sus nietos, algo intimidatorio para el magistrado.
En ese sentido, un juez federal explicó a LPO que la multitudinaria marcha del kirchnerismo retumbó este miércoles en el Poder Judicial. «Se pasaron de rosca, no midieron las consecuencias, es como el 2×1», dijo en referencia al fallo de la Corte Suprema que pretendía beneficiar al represor Luis Muiña en 2017.
La interpretación extendida es que en el Poder Judicial «tomaron nota de la multitud». Una de las imágenes que más incomodó a los magistrados habría sido la de la columna de La Cámpora, con una bandera en la cabecera con un mensaje teledirigido: «Jueces macristas, no jodan con Cristina».
«El repudio en la calle no le gusta a nadie. Menos, cuando es de este alcance. Y eso que frenaron los micros», reflexionó uno de ellos.

Columna de La Cámpora en la marcha.
Los jueces de Comodoro Py entraron en pánico el martes por la mañana, cuando se percataron de la magnitud de la manifestación que preparaba el peronismo para acompañar a Cristina Kirchner hasta los tribunales, donde debían notificarle su detención. Fuentes judiciales revelaron a LPO que, durante la reunión de Superintendencia de la Cámara de Casación, los magistrados del máximo tribunal penal evaluaron una disposición para que los empleados realicen sus tareas laborales bajo la modalidad de home office.
La alienación de los camaristas frente a la caravana que planificaban los seguidores de la exmandataria fue tal que hasta discutieron sobre la conveniencia de colocar francotiradores en el vetusto edificio de Retiro.
El presidente de la cámara, Daniel Petrone, informó a sus pares que había recibido un oficio de parte del juez Jorge Gorini, titular del tribunal oral que condenó a la expresidenta, advirtiendo que los días 17 y 18 de junio se harían efectivas las detenciones en la causa Vialidad y requería «medidas de seguridad suficientes».
Las autoridades de Comodoro Py se pusieron en contacto con Policía Federal y Policía de la Ciudad. Hasta el ministro de Seguridad porteño, Horacio Giménez, se comunicó con el secretario general de la Cámara, Juan Manuel Montesano Rebón, para interiorizarse y lo propio hicieron funcionarios del gobierno nacional.
Cristina: «Este modelo se cae y el poder económico lo sabe, por eso estoy presa»
Un camarista le dijo a LPO que, tras el anuncio de que la movilización se haría hacia Plaza de Mayo, «lo único que importaba era que la marcha no era en Py». «Caído lo de (Ariel) Lijo, no hay referencia que haga bisagra entre política y Justicia, el gobierno (Sebastián Amerio) no tiene mucha más llegada que sobre Mariano Llorens», argumentó, y también alertó que el ministro Mariano Cúneo Libarona «está pintado y el resto, cada cual hace la suya».
El nerviosismo era tan fuerte que el comisario mayor Gonzalo Pelacchi, responsable de la PFA, garantizó la instalación de «una unidad de avanzada en el exterior» de Comodoro Py. El jefe de Custodia y Seguridad del edificio, Jorge Hermida, informó por su parte a los magistrados que contaban con refuerzos desplegados, dos camiones celulares y el apoyo del Grupo Especial de Operaciones de la Policía (GEOP), que había concurrido para inspeccionar las instalaciones durante el fin de semana.
Pero el terror de los jueces no se habría detenido en ese punto. En los pasillos de tribunales, comentaron a LPO que la jueza Angela Ledesema se manifestó contra el despliegue de snipers (francotiradores) y que los uniformados desfilen por Comodoro Py portando sus armas. Prevaleció la cordura y sus pares aceptaron el planteo.
Un fiscal al tanto de lo que discutieron los camaristas le dijo a LPO que el juez Carlos Mahiques expresó su preocupación por el hecho de que en la ciudad bonaerense de Mercedes aparecieran volantes agraviantes contra él y sus hijos, por la detención de Cristina. Esa acción de agitación política se habría producido en la puerta de la escuela de sus nietos, algo intimidatorio para el magistrado.
En ese sentido, un juez federal explicó a LPO que la multitudinaria marcha del kirchnerismo retumbó este miércoles en el Poder Judicial. «Se pasaron de rosca, no midieron las consecuencias, es como el 2×1», dijo en referencia al fallo de la Corte Suprema que pretendía beneficiar al represor Luis Muiña en 2017.
La interpretación extendida es que en el Poder Judicial «tomaron nota de la multitud». Una de las imágenes que más incomodó a los magistrados habría sido la de la columna de La Cámpora, con una bandera en la cabecera con un mensaje teledirigido: «Jueces macristas, no jodan con Cristina».
«El repudio en la calle no le gusta a nadie. Menos, cuando es de este alcance. Y eso que frenaron los micros», reflexionó uno de ellos.

Columna de La Cámpora en la marcha.
Los magistrados tomaron nota de la multitudinaria manifestación en defensa de Cristina. «Se pasaron de rosca, es como el 2×1», dijo una fuente judicial. Leer más