Temor por la táctica que usa el ICE para detener a migrantes en lugares de trabajo

Luego de los incidentes ocurridos en Los Angeles, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) intensificó sus operativos en lugares de trabajo a lo largo de Estados Unidos. Los agentes han realizado incursiones en fábricas, empacadoras, lavaderos de autos y establecimientos comerciales, en su mayoría sin notificación previa, lo que genera un clima de incertidumbre y temor entre empleados y empleadores.
El efecto de las redadas de ICE en centros de trabajo
Los estados de Nebraska, Texas, California y Louisiana se han convertido en puntos críticos de estos operativos. Según confirmó la propia agencia, las redadas forman parte de un programa más amplio de control migratorio impulsado por la actual administración federal.
Uno de los operativos más recientes tuvo lugar el 10 de junio en Glenn Valley Foods, una empresa alimenticia ubicada en Omaha, Nebraska. ICE informó que ejecutó una orden de registro en el lugar, donde se identificó el empleo a gran escala de trabajadores sin autorización legal. El operativo resultó en la detención de más de 70 personas.
De acuerdo con los informes oficiales, varios de los arrestados tenían antecedentes por delitos menores o reincidencia migratoria. La agencia también señaló que algunos enfrentan cargos adicionales como fraude, uso de documentos falsos y reingreso ilegal al país. Según autoridades, el operativo respondió a la necesidad de combatir prácticas laborales que “alientan la inmigración ilegal”.
El director de la planta, Gary Rohwer, rechazó la forma en la que se llevó a cabo la intervención. Alegó que la compañía ha cumplido con los protocolos establecidos, que incluyó el uso de E-Verify, y expresó su desconcierto por ser objeto del operativo.
“Lo hemos usado todos estos años, así que quedé sorprendido. Hicimos todo lo que pudimos hacer”, afirmó en declaraciones con Associated Press (AP).
Impacto social y comunitario por las tácticas empleadas por agentes de ICE
El operativo tuvo un fuerte impacto en la ciudad. Roger García Soto, comisionado del condado de Douglas, expresó su preocupación por las consecuencias humanas del operativo. “Las redadas de hoy afectan a niños, padres, esposos. Es un gran dolor para nuestra comunidad”, dijo en una entrevista con Univision.
La planta, que operaba con normalidad, pasó a funcionar a un 30% de su capacidad tras las detenciones masivas. El evento dejó en evidencia el grado de dependencia que muchos negocios tienen respecto a la mano de obra migrante.
Redadas migratorias en lavaderos de autos en California
En el sur de California, varios autolavados fueron escenario de acciones similares. Una cámara de seguridad en Downey captó el momento en que agentes vestidos con equipo táctico ingresaron al establecimiento y comenzaron a perseguir a los empleados. Dos trabajadores fueron arrestados.
La dueña del negocio le aseguró a Telemundo 52 que no recibió ningún tipo de aviso y que el operativo ocurrió en minutos. En la grabación se observan a los agentes entrar al lavadero con pasamontañas e inmediatamente comienzan a correr detrás de los trabajadores. “Nunca hubo una advertencia”, le dijo un testigo al mismo medio.
Organizaciones como Clean Carwash Worker Center confirmaron que, al menos, seis lavaderos de autos en Los Ángeles y el condado de Orange fueron blanco de redadas similares. “Calculamos que más de 20 trabajadores han sido detenidos. Estamos anticipando más redadas de ICE”, informaron en Facebook.
En Culver City, otro operativo provocó protestas espontáneas. Familiares de los empleados detenidos se congregaron afuera del negocio para exigir su liberación. “Solo quiero volver a ver a mi papá”, dijo Yaslin, hija de uno de los trabajadores arrestados, en una entrevista con Telemundo.
Louisiana y Texas: registros y detenciones en comercios
En Louisiana, los agentes de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) llevaron a cabo una operación simultánea en nueve establecimientos de masajes en Baton Rouge. Diez mujeres de nacionalidad china fueron detenidas y sometidas a entrevistas para determinar su situación migratoria. El operativo estuvo relacionado con presuntos casos de proxenetismo, según las autoridades.
En Texas, agentes del ICE, junto con personal del FBI y la DEA, intervinieron dos locales comerciales en Harlingen y San Benito, lo que resultó en la detención de 12 personas. Una de ellas fue acusada de agredir a un agente federal, lo que derivó en cargos penales adicionales. Los arrestados son originarios de México y El Salvador.
Las redadas en lugares de trabajo son parte del plan de deportación masiva que impulsa el presidente Donald Trump, quien ha retomado como eje de su campaña el endurecimiento de las políticas migratorias. Desde mayo, el objetivo diario de arrestos ha aumentado a 3000 personas, lo que intensificó la presencia de ICE en múltiples sectores.
Luego de los incidentes ocurridos en Los Angeles, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) intensificó sus operativos en lugares de trabajo a lo largo de Estados Unidos. Los agentes han realizado incursiones en fábricas, empacadoras, lavaderos de autos y establecimientos comerciales, en su mayoría sin notificación previa, lo que genera un clima de incertidumbre y temor entre empleados y empleadores.
El efecto de las redadas de ICE en centros de trabajo
Los estados de Nebraska, Texas, California y Louisiana se han convertido en puntos críticos de estos operativos. Según confirmó la propia agencia, las redadas forman parte de un programa más amplio de control migratorio impulsado por la actual administración federal.
Uno de los operativos más recientes tuvo lugar el 10 de junio en Glenn Valley Foods, una empresa alimenticia ubicada en Omaha, Nebraska. ICE informó que ejecutó una orden de registro en el lugar, donde se identificó el empleo a gran escala de trabajadores sin autorización legal. El operativo resultó en la detención de más de 70 personas.
De acuerdo con los informes oficiales, varios de los arrestados tenían antecedentes por delitos menores o reincidencia migratoria. La agencia también señaló que algunos enfrentan cargos adicionales como fraude, uso de documentos falsos y reingreso ilegal al país. Según autoridades, el operativo respondió a la necesidad de combatir prácticas laborales que “alientan la inmigración ilegal”.
El director de la planta, Gary Rohwer, rechazó la forma en la que se llevó a cabo la intervención. Alegó que la compañía ha cumplido con los protocolos establecidos, que incluyó el uso de E-Verify, y expresó su desconcierto por ser objeto del operativo.
“Lo hemos usado todos estos años, así que quedé sorprendido. Hicimos todo lo que pudimos hacer”, afirmó en declaraciones con Associated Press (AP).
Impacto social y comunitario por las tácticas empleadas por agentes de ICE
El operativo tuvo un fuerte impacto en la ciudad. Roger García Soto, comisionado del condado de Douglas, expresó su preocupación por las consecuencias humanas del operativo. “Las redadas de hoy afectan a niños, padres, esposos. Es un gran dolor para nuestra comunidad”, dijo en una entrevista con Univision.
La planta, que operaba con normalidad, pasó a funcionar a un 30% de su capacidad tras las detenciones masivas. El evento dejó en evidencia el grado de dependencia que muchos negocios tienen respecto a la mano de obra migrante.
Redadas migratorias en lavaderos de autos en California
En el sur de California, varios autolavados fueron escenario de acciones similares. Una cámara de seguridad en Downey captó el momento en que agentes vestidos con equipo táctico ingresaron al establecimiento y comenzaron a perseguir a los empleados. Dos trabajadores fueron arrestados.
La dueña del negocio le aseguró a Telemundo 52 que no recibió ningún tipo de aviso y que el operativo ocurrió en minutos. En la grabación se observan a los agentes entrar al lavadero con pasamontañas e inmediatamente comienzan a correr detrás de los trabajadores. “Nunca hubo una advertencia”, le dijo un testigo al mismo medio.
Organizaciones como Clean Carwash Worker Center confirmaron que, al menos, seis lavaderos de autos en Los Ángeles y el condado de Orange fueron blanco de redadas similares. “Calculamos que más de 20 trabajadores han sido detenidos. Estamos anticipando más redadas de ICE”, informaron en Facebook.
En Culver City, otro operativo provocó protestas espontáneas. Familiares de los empleados detenidos se congregaron afuera del negocio para exigir su liberación. “Solo quiero volver a ver a mi papá”, dijo Yaslin, hija de uno de los trabajadores arrestados, en una entrevista con Telemundo.
Louisiana y Texas: registros y detenciones en comercios
En Louisiana, los agentes de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) llevaron a cabo una operación simultánea en nueve establecimientos de masajes en Baton Rouge. Diez mujeres de nacionalidad china fueron detenidas y sometidas a entrevistas para determinar su situación migratoria. El operativo estuvo relacionado con presuntos casos de proxenetismo, según las autoridades.
En Texas, agentes del ICE, junto con personal del FBI y la DEA, intervinieron dos locales comerciales en Harlingen y San Benito, lo que resultó en la detención de 12 personas. Una de ellas fue acusada de agredir a un agente federal, lo que derivó en cargos penales adicionales. Los arrestados son originarios de México y El Salvador.
Las redadas en lugares de trabajo son parte del plan de deportación masiva que impulsa el presidente Donald Trump, quien ha retomado como eje de su campaña el endurecimiento de las políticas migratorias. Desde mayo, el objetivo diario de arrestos ha aumentado a 3000 personas, lo que intensificó la presencia de ICE en múltiples sectores.
El ICE implementa una nueva táctica para detener migrantes en sus lugares de trabajo, con operativos sorpresa, arrestos masivos y un patrón que se repite en distintas empresas de EE.UU. LA NACION