El desolador descargo de la hermana de la mujer que fue asesinada en un gimnasio: “Nadie es quién para quitarle la vida a nadie”

La hermana de la mujer que fue asesinada en un gimnasio en Moreno por un policía habló públicamente, dijo que está atravesando un trágico momento y lamentó no poder estar presente para apoyar a su familia. “Soy jubilada de la mínima y no tengo para viajar”, expresó llorando.
“Estoy mal obviamente, nadie es quién para quitarle la vida a nadie. Tendría que estar allá acompañando a mi hermana y a mi mamá pero soy jubilada de la mínima y no tengo para viajar”, afirmó en TN Miriam, hermana de la víctima -quien vive en Córdoba- y agregó: “Me enteré ahora -del femicidio- por una de mis hijas, que había estado en la comisaría. Este señor primero le pegó a la ex y luego amenazó a mi hermana».
Además, continuó: “Mi hermana no entendía que no estaba bien que siguiera con esa chica porque jugaba. Hasta donde entiendo, no solo estaba con ella, sino que iba y venía con este hombre, que era su ex. Ella iba y venía con él. Entonces, es sentido común, no se puede jugar con la gente así. Ella ya había estado en la comisaría, este señor ya le había pegado a su ex y amenazado a mi hermana también. Por eso termina como termina”.
La víctima, identificada como Marcela Heredia, fue asesinada por Danielo Gabriel Fernando de 39 años, un policía que ingresó al gimnasio de su expareja, Anabella Florentín (35), a quien tomó como rehén y mantuvo prisionera en el establecimiento por al menos dos horas, hasta que la liberó pasadas las 19. Heredia era la novia de Florentín, según relató Miriam.
El gimnasio quedó rodeado por policías bonaerenses, hay ambulancias y bomberos, mientras, pasadas las 00.50, el hombre permanecía atrincherado solo. Desde que ingresó al gimnasio quedaron varias personas como rehenes, pero el último fue liberado alrededor de las 20.
Un negociador del Grupo Halcón de la fuerza de seguridad bonaerense estableció contacto con el agresor, que tiene su arma reglamentaria, e intenta convencerlo para que se entregue.
Alrededor de las 18, el hombre entregó una carta a los policías del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) que están a cargo del operativo en el local situado en la esquina de Sáenz Peña y Centenario, en el barrio Alcorta, de Moreno. Sin embargo, el contenido no trascendió.
Se estima que la secuencia empezó a las 16.30, cuando el policía de la Ciudad, de la comisaría 2-B, llegó al gimnasio, discutió con su expareja, que lo había denunciado por violencia de género y Heredia se interpuso para tratar de frenar el ataque. En ese momento, Fernando agarró su arma reglamentaria y disparó cinco balazos contra ella y, tras matarla, se atrincheró en el primer piso del gimnasio.
Según indicaron fuentes judiciales, el agresor y la mujer que estuvo tomada como rehén tienen dos hijos y, aparentemente, al hombre se le había comunicado una perimetral que impuso un juzgado de Familia de Moreno, la cual no fue respetada.
La hermana de la mujer que fue asesinada en un gimnasio en Moreno por un policía habló públicamente, dijo que está atravesando un trágico momento y lamentó no poder estar presente para apoyar a su familia. “Soy jubilada de la mínima y no tengo para viajar”, expresó llorando.
“Estoy mal obviamente, nadie es quién para quitarle la vida a nadie. Tendría que estar allá acompañando a mi hermana y a mi mamá pero soy jubilada de la mínima y no tengo para viajar”, afirmó en TN Miriam, hermana de la víctima -quien vive en Córdoba- y agregó: “Me enteré ahora -del femicidio- por una de mis hijas, que había estado en la comisaría. Este señor primero le pegó a la ex y luego amenazó a mi hermana».
Además, continuó: “Mi hermana no entendía que no estaba bien que siguiera con esa chica porque jugaba. Hasta donde entiendo, no solo estaba con ella, sino que iba y venía con este hombre, que era su ex. Ella iba y venía con él. Entonces, es sentido común, no se puede jugar con la gente así. Ella ya había estado en la comisaría, este señor ya le había pegado a su ex y amenazado a mi hermana también. Por eso termina como termina”.
La víctima, identificada como Marcela Heredia, fue asesinada por Danielo Gabriel Fernando de 39 años, un policía que ingresó al gimnasio de su expareja, Anabella Florentín (35), a quien tomó como rehén y mantuvo prisionera en el establecimiento por al menos dos horas, hasta que la liberó pasadas las 19. Heredia era la novia de Florentín, según relató Miriam.
El gimnasio quedó rodeado por policías bonaerenses, hay ambulancias y bomberos, mientras, pasadas las 00.50, el hombre permanecía atrincherado solo. Desde que ingresó al gimnasio quedaron varias personas como rehenes, pero el último fue liberado alrededor de las 20.
Un negociador del Grupo Halcón de la fuerza de seguridad bonaerense estableció contacto con el agresor, que tiene su arma reglamentaria, e intenta convencerlo para que se entregue.
Alrededor de las 18, el hombre entregó una carta a los policías del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) que están a cargo del operativo en el local situado en la esquina de Sáenz Peña y Centenario, en el barrio Alcorta, de Moreno. Sin embargo, el contenido no trascendió.
Se estima que la secuencia empezó a las 16.30, cuando el policía de la Ciudad, de la comisaría 2-B, llegó al gimnasio, discutió con su expareja, que lo había denunciado por violencia de género y Heredia se interpuso para tratar de frenar el ataque. En ese momento, Fernando agarró su arma reglamentaria y disparó cinco balazos contra ella y, tras matarla, se atrincheró en el primer piso del gimnasio.
Según indicaron fuentes judiciales, el agresor y la mujer que estuvo tomada como rehén tienen dos hijos y, aparentemente, al hombre se le había comunicado una perimetral que impuso un juzgado de Familia de Moreno, la cual no fue respetada.
Miriam, familiar de la víctima, dijo que el agresor ya la había amenazado en otras ocasiones; “No se puede jugar con la gente así”, expresó LA NACION