El gobierno admite que los salarios del Garrahan son «un desastre», pero gasta 100 millones en medir el presentismoEl gobierno admite que los salarios del Garrahan son «un desastre», pero gasta 100 millones en medir el presentismo

En medio de las protestas de los trabajadores del Hospital Garrahan, el gobierno admitió que la situación de los sueldos es «un desastre». Además, los trabajadores denunciaron que el gobierno gastó 100 millones de pesos para instalar un lector biométrico.
El gobierno buscó instalar la versión de que los salarios en el Garrahan eran bajos porque el hospital tiene «muchos empleados».
«Adorni salió a decir que protestamos porque instalaron un lector biométrico. Es completamente falso: el problema es que el personal cobra una miseria», le dijo LPO Gerardo Oroz, delegado de ATE.
El sistema de lectura para medir el presentismo del personal costó cerca de 100 millones de pesos.
El gobierno avanza con el vaciamiento del Garrahan, ya renunciaron más de cien trabajadores
Los trabajadores también desmintieron la cifra de trabajadores que hizo circular el gobierno. Desde el oficialismo pusieron énfasis en que la dotación de empleados administrativos duplicaba a la de médicos.
«El personal del Garrahan está compuesto por 953 administrativos y 478 médicos. En la última gestión K se contrataron 1200 empleados. Hicieron política partidaria con la salud de los niños», criticó el subsecretario de Prensa, Javier Lanari.
Según cifras oficiales, los administrativos son 473, mientras que el personal asistencial representa casi el 70% de los 4728 empleados del hospital. Los médicos
Además de Adorni y Lanari, fue Cecilia Loccisano, la viceministra de Salud, fue quien se hizo cargo de la defensa del Gobierno.
«Nosotros consideramos que los sueldos son bajos y desde ya tenemos que trabajar para recomponer la situación de los médicos porque es apremiante. Es un desastre, es algo en lo que nosotros tenemos que intervenir», dijo Loccisano.
Mario Lugones, el ministro, prefirió quedarse a resguardo por los escándalos de corrupción de Pami y de Anses.
En medio de las protestas de los trabajadores del Hospital Garrahan, el gobierno admitió que la situación de los sueldos es «un desastre». Además, los trabajadores denunciaron que el gobierno gastó 100 millones de pesos para instalar un lector biométrico.
El gobierno buscó instalar la versión de que los salarios en el Garrahan eran bajos porque el hospital tiene «muchos empleados».
«Adorni salió a decir que protestamos porque instalaron un lector biométrico. Es completamente falso: el problema es que el personal cobra una miseria», le dijo LPO Gerardo Oroz, delegado de ATE.
El sistema de lectura para medir el presentismo del personal costó cerca de 100 millones de pesos.
El gobierno avanza con el vaciamiento del Garrahan, ya renunciaron más de cien trabajadores
Los trabajadores también desmintieron la cifra de trabajadores que hizo circular el gobierno. Desde el oficialismo pusieron énfasis en que la dotación de empleados administrativos duplicaba a la de médicos.
«El personal del Garrahan está compuesto por 953 administrativos y 478 médicos. En la última gestión K se contrataron 1200 empleados. Hicieron política partidaria con la salud de los niños», criticó el subsecretario de Prensa, Javier Lanari.
Según cifras oficiales, los administrativos son 473, mientras que el personal asistencial representa casi el 70% de los 4728 empleados del hospital. Los médicos
Además de Adorni y Lanari, fue Cecilia Loccisano, la viceministra de Salud, fue quien se hizo cargo de la defensa del Gobierno.
«Nosotros consideramos que los sueldos son bajos y desde ya tenemos que trabajar para recomponer la situación de los médicos porque es apremiante. Es un desastre, es algo en lo que nosotros tenemos que intervenir», dijo Loccisano.
Mario Lugones, el ministro, prefirió quedarse a resguardo por los escándalos de corrupción de Pami y de Anses.
El gobierno buscó instalar que el Garrahan tiene el doble de administrativos que médicos, pero el anuario aprobado por el mileísmo lo desmiente. Leer más