NacionalesUltimas Noticias

Jaime Bayly: “Vargas Llosa fue un genio de las artes; no fue un genio político”

No en uno sino en varios videos de su canal de YouTube, el escritor y periodista peruano Jaime Bayly despidió al Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, que falleció el pasado 13 a los 89 años, en Lima. En uno de ellos cuenta que en junio de 2024 un “informante peruano” le había dicho que el autor de Los cachorros recibía tratamiento por cáncer hematológico en un centro de salud madrileño -el Hospital Jiménez Díaz- al que a veces llegaba acompañado de su hija Morgana. “¿Lo cuento o no lo cuento?“, dudaba Bayly mientras Vargas Llosa aún vivía. ”No podía estar seguro de que esa información fuera fiable, y aun si lo fuera, y mi corazón me inducía a pensar que era verdad, aún así pensaba que no me correspondía a mí hacer el anuncio».

Bayly fue amigo del escritor y de su hijo mayor, Álvaro Vargas Llosa (al que llama “el Dalai Lama del liberalismo”), de quienes luego se distanció, como contó en una columna publicada en LA NACION. “A finales de los noventa le hice una entrevista a Fujimori en mi programa -escribió Bayly-. La entrevista fue amigable, complaciente. Vargas Llosa no me perdonó esa debilidad. Cuando nos encontramos en la Feria del Libro de Santo Domingo, no quiso saludarme, me ignoró, aunque Patricia me saludó luego”. Años después, el Nobel opinó que Los genios, novela de no ficción donde Bayly reconstruye la relación de amistad-enemistad entre Vargas Llosa y Gabriel García Márquez, “seguramente era un montón de mentiras”.

En otro video, sostiene que Vargas Llosa era un genio artístico, mas no un genio político y que en las últimas elecciones en el Perú había apoyado “a tres ladrones”, en referencia a Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski (los tres expresidentes fueron condenados por corrupción). Ayer, Domingo de Pascua, le dedicó el video “El día que insulté a Vargas Llosa”, donde reflexiona sobre la hipocresía de los elogios póstumos y ahonda en las contradicciones del escritor. “No hay genios perfectos”, afirma Bayly.

Una enfermedad incurable

“Me pareció prudente guardar silencio, cosa que es muy rara, muy atípica en mí“, admite, y agrega sobre la “enfermedad incurable” del escritor: ”La familia tuvo la delicadeza de no decir qué enfermedad había matado al Premio Nobel de Literatura”. Bayly, que considera a Vargas Llosa un “escritor inmortal”, indica que el diagnóstico de la enfermedad había sido hecho en 2020, cuando el Nobel de Literatura 2010 aún era pareja de la “reina de corazones”, como denomina a Isabel Preysler. Desde entonces, presume, los hijos trazaron una “estrategia” para que el escritor regresara a su familia, “y cuando digo su familia incluyo a Patricia Vargas Llosa, de quien se había divorciado”.

Además, cuenta por qué Patricia Vargas Llosa había sido “una mujer muy sabia” al perdonar a su marido al que Bayly rebautiza como el “Premio Nobel del Incesto”, por haber sido pareja de su tía, Julia Urquidi, y luego de su prima hermana. “Si Patricia lo hubiera dejado y luego hubiera querido volver con él, ¿Vargas Llosa la habría perdonado?“, se pregunta Bayly, y se responde: ”De ninguna manera».

La “gran pregunta” que se hace Bayly es si Vargas Llosa le contó a Preysler que tenía una “enfermedad gravísima” o si se retiró “con elegancia” de la residencia que compartían en Puerta de Hierro. “Ella no se asomó mucho mientras él estuvo internado con coronavirus”, apunta. “Esta enfermedad que ha terminado de matar al gran Vargas Llosa le permitió preparar las circunstancias de su muerte; él sabía que se estaba muriendo, el mundo no lo sabía”.

“Cuando él decidió volver a Lima, él decide morir en Lima”, dice Bayly, sorprendido de que Vargas Llosa no hubiera elegido morir en España, país que en su opinión lo convirtió en un “escritor universal”. Tampoco esperaba que el cuerpo sería incinerado. “Pudo morir en su casa, con Patricia, su mujer de toda la vida, con sus hijos y sus amigos más cercanos. Me ha sorprendido para bien que eligiera morir en Lima y no reposar bajo una lápida elegante sino reducirse a cenizas y entrar en el mar de Paracas. Hasta en eso fue un hombre sabio y ha muerto sabiamente”.

“Vargas Llosa apoyó a tres presidentes ladrones”

En otro video, “Apoyó a tres presidentes ladrones”, Bayly sostiene Vargas Llosa fue “un genio artístico, un genio de las de las artes; no fue un genio político” y que en su juventud había apoyado incluso el golpe miliar de Juan Velasco Alvarado. “Era comunista o casi; admirador de Fidel Castro, bastante, y no demasiado comprometido con los principios de la democracia liberal […]. Por suerte no apoyó la confiscación de los periódicos”, prosigue.

También, en su opinión, Vargas Llosa se equivocó al buscar la candidatura presidencial en 1990, “como si fuera un tesoro y no lo era, era un botín envenenado”. Lo compara con la decisión de García Márquez, a quien según dice le ofrecieron ser candidato a presidente en Colombia. “Él fue sabio, él supo esquivarla”, observa. Para Bayly, el autor de Cien años de soledad no era comunista, sino oportunista, “es decir que cortejaba el poder en todas sus formas ideológicas; era amigo del rey de España y era amigo de Fidel Castro, le gustaba la buena vida”.

“Pensó que ser presidente del Perú es más importante que ser escritor, ese fue un error de cálculo conspicuo”, dice sobre Vargas Llosa que tuvo otro traspié al apoyar a Fernando Belaúnde Terry.

No obstante, no todos fueron errores en política. “Cuando Fujimori dio el golpe de Estado, Vargas Llosa, que estaba fuera del país, no se equivocó [al criticarlo], ese fue uno de sus grandes aciertos políticos -asegura-. La inmensa mayoría de peruanos, me consta, aplaudió con entusiasmo el golpe de Fujimori. […] Le decían [a Vargas Llosa] traidor a la patria, resentido, te pones en el camino y quieres que le vaya mal solo porque te ganó en las elecciones”.El autor de La fiesta del Chivo, dice Bayly, en 1992 ya era “un pensador liberal”.

“Cuando cayó Fujimori y se propalaron los videos de la corrupción de Fujimori y se constató que Fujimori estaba rodeado de grandes ladrones, Vargas Llosa se sintió reivindicado”, resalta.

“Borges no hubiera votado a Milei, mucho menos a Massa”

Para Bayly, Vargas Llosa se equivocó al apoyar a Toledo, “cuando ya se podía sospechar que Toledo era un canalla, un mitómano, un embustero”. Y también al “hacer campaña” por Ollanta Humala. “Entiendo que no quería apoyar a Keiko [Fujimori], pero tampoco tenía que apoyar a Humala […]. Todo el mundo sabía que era un pícaro, un ladronzuelo, un arribista, un trepador”.

“Otro error político fue Kuczynski. No entiendo por qué no apoyo a [Alfredo] Barnechea, amigo muy amigo de Vargas Llosa”, prosigue. “Fue un error Kuczynski, también robó, pero fue un ladrón refinado”, acota Bayly.

La “moraleja” que saca Bayly es que un escritor o artista debe “desconfiar en general de los políticos y no elegir entre varios a uno y hacer campaña por ese que uno ha elegido; quizás es mejor tomar una distancia crítica de todos”.

Da como ejemplo a Jorge Luis Borges. “El artista tiene un poder y debe usarlo sabiamente y no debe convertirse en un fanático de un candidato político. Si Borges todavía hubiera estado vivo en la segunda vuelta entre Milei y Massa, no hubiera apoyado a Milei, y mucho menos a Massa. Creo que hay que ir por ahí”.

Al concluir el video sobre “el poco genio político” de Vargas Llosa, Bayly anticipa que en las próximas elecciones Bayly no apoyará a ningún candidato. “Elijo estar en la oposición a todos -dice-. El escritor, el artista, debería estar por encima y debería usar sabiamente su poder, el poder de su inteligencia, de sus palabras, de su verbo, de sus escritos, para criticar a los políticos”.

No en uno sino en varios videos de su canal de YouTube, el escritor y periodista peruano Jaime Bayly despidió al Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, que falleció el pasado 13 a los 89 años, en Lima. En uno de ellos cuenta que en junio de 2024 un “informante peruano” le había dicho que el autor de Los cachorros recibía tratamiento por cáncer hematológico en un centro de salud madrileño -el Hospital Jiménez Díaz- al que a veces llegaba acompañado de su hija Morgana. “¿Lo cuento o no lo cuento?“, dudaba Bayly mientras Vargas Llosa aún vivía. ”No podía estar seguro de que esa información fuera fiable, y aun si lo fuera, y mi corazón me inducía a pensar que era verdad, aún así pensaba que no me correspondía a mí hacer el anuncio».

Bayly fue amigo del escritor y de su hijo mayor, Álvaro Vargas Llosa (al que llama “el Dalai Lama del liberalismo”), de quienes luego se distanció, como contó en una columna publicada en LA NACION. “A finales de los noventa le hice una entrevista a Fujimori en mi programa -escribió Bayly-. La entrevista fue amigable, complaciente. Vargas Llosa no me perdonó esa debilidad. Cuando nos encontramos en la Feria del Libro de Santo Domingo, no quiso saludarme, me ignoró, aunque Patricia me saludó luego”. Años después, el Nobel opinó que Los genios, novela de no ficción donde Bayly reconstruye la relación de amistad-enemistad entre Vargas Llosa y Gabriel García Márquez, “seguramente era un montón de mentiras”.

En otro video, sostiene que Vargas Llosa era un genio artístico, mas no un genio político y que en las últimas elecciones en el Perú había apoyado “a tres ladrones”, en referencia a Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski (los tres expresidentes fueron condenados por corrupción). Ayer, Domingo de Pascua, le dedicó el video “El día que insulté a Vargas Llosa”, donde reflexiona sobre la hipocresía de los elogios póstumos y ahonda en las contradicciones del escritor. “No hay genios perfectos”, afirma Bayly.

Una enfermedad incurable

“Me pareció prudente guardar silencio, cosa que es muy rara, muy atípica en mí“, admite, y agrega sobre la “enfermedad incurable” del escritor: ”La familia tuvo la delicadeza de no decir qué enfermedad había matado al Premio Nobel de Literatura”. Bayly, que considera a Vargas Llosa un “escritor inmortal”, indica que el diagnóstico de la enfermedad había sido hecho en 2020, cuando el Nobel de Literatura 2010 aún era pareja de la “reina de corazones”, como denomina a Isabel Preysler. Desde entonces, presume, los hijos trazaron una “estrategia” para que el escritor regresara a su familia, “y cuando digo su familia incluyo a Patricia Vargas Llosa, de quien se había divorciado”.

Además, cuenta por qué Patricia Vargas Llosa había sido “una mujer muy sabia” al perdonar a su marido al que Bayly rebautiza como el “Premio Nobel del Incesto”, por haber sido pareja de su tía, Julia Urquidi, y luego de su prima hermana. “Si Patricia lo hubiera dejado y luego hubiera querido volver con él, ¿Vargas Llosa la habría perdonado?“, se pregunta Bayly, y se responde: ”De ninguna manera».

La “gran pregunta” que se hace Bayly es si Vargas Llosa le contó a Preysler que tenía una “enfermedad gravísima” o si se retiró “con elegancia” de la residencia que compartían en Puerta de Hierro. “Ella no se asomó mucho mientras él estuvo internado con coronavirus”, apunta. “Esta enfermedad que ha terminado de matar al gran Vargas Llosa le permitió preparar las circunstancias de su muerte; él sabía que se estaba muriendo, el mundo no lo sabía”.

“Cuando él decidió volver a Lima, él decide morir en Lima”, dice Bayly, sorprendido de que Vargas Llosa no hubiera elegido morir en España, país que en su opinión lo convirtió en un “escritor universal”. Tampoco esperaba que el cuerpo sería incinerado. “Pudo morir en su casa, con Patricia, su mujer de toda la vida, con sus hijos y sus amigos más cercanos. Me ha sorprendido para bien que eligiera morir en Lima y no reposar bajo una lápida elegante sino reducirse a cenizas y entrar en el mar de Paracas. Hasta en eso fue un hombre sabio y ha muerto sabiamente”.

“Vargas Llosa apoyó a tres presidentes ladrones”

En otro video, “Apoyó a tres presidentes ladrones”, Bayly sostiene Vargas Llosa fue “un genio artístico, un genio de las de las artes; no fue un genio político” y que en su juventud había apoyado incluso el golpe miliar de Juan Velasco Alvarado. “Era comunista o casi; admirador de Fidel Castro, bastante, y no demasiado comprometido con los principios de la democracia liberal […]. Por suerte no apoyó la confiscación de los periódicos”, prosigue.

También, en su opinión, Vargas Llosa se equivocó al buscar la candidatura presidencial en 1990, “como si fuera un tesoro y no lo era, era un botín envenenado”. Lo compara con la decisión de García Márquez, a quien según dice le ofrecieron ser candidato a presidente en Colombia. “Él fue sabio, él supo esquivarla”, observa. Para Bayly, el autor de Cien años de soledad no era comunista, sino oportunista, “es decir que cortejaba el poder en todas sus formas ideológicas; era amigo del rey de España y era amigo de Fidel Castro, le gustaba la buena vida”.

“Pensó que ser presidente del Perú es más importante que ser escritor, ese fue un error de cálculo conspicuo”, dice sobre Vargas Llosa que tuvo otro traspié al apoyar a Fernando Belaúnde Terry.

No obstante, no todos fueron errores en política. “Cuando Fujimori dio el golpe de Estado, Vargas Llosa, que estaba fuera del país, no se equivocó [al criticarlo], ese fue uno de sus grandes aciertos políticos -asegura-. La inmensa mayoría de peruanos, me consta, aplaudió con entusiasmo el golpe de Fujimori. […] Le decían [a Vargas Llosa] traidor a la patria, resentido, te pones en el camino y quieres que le vaya mal solo porque te ganó en las elecciones”.El autor de La fiesta del Chivo, dice Bayly, en 1992 ya era “un pensador liberal”.

“Cuando cayó Fujimori y se propalaron los videos de la corrupción de Fujimori y se constató que Fujimori estaba rodeado de grandes ladrones, Vargas Llosa se sintió reivindicado”, resalta.

“Borges no hubiera votado a Milei, mucho menos a Massa”

Para Bayly, Vargas Llosa se equivocó al apoyar a Toledo, “cuando ya se podía sospechar que Toledo era un canalla, un mitómano, un embustero”. Y también al “hacer campaña” por Ollanta Humala. “Entiendo que no quería apoyar a Keiko [Fujimori], pero tampoco tenía que apoyar a Humala […]. Todo el mundo sabía que era un pícaro, un ladronzuelo, un arribista, un trepador”.

“Otro error político fue Kuczynski. No entiendo por qué no apoyo a [Alfredo] Barnechea, amigo muy amigo de Vargas Llosa”, prosigue. “Fue un error Kuczynski, también robó, pero fue un ladrón refinado”, acota Bayly.

La “moraleja” que saca Bayly es que un escritor o artista debe “desconfiar en general de los políticos y no elegir entre varios a uno y hacer campaña por ese que uno ha elegido; quizás es mejor tomar una distancia crítica de todos”.

Da como ejemplo a Jorge Luis Borges. “El artista tiene un poder y debe usarlo sabiamente y no debe convertirse en un fanático de un candidato político. Si Borges todavía hubiera estado vivo en la segunda vuelta entre Milei y Massa, no hubiera apoyado a Milei, y mucho menos a Massa. Creo que hay que ir por ahí”.

Al concluir el video sobre “el poco genio político” de Vargas Llosa, Bayly anticipa que en las próximas elecciones Bayly no apoyará a ningún candidato. “Elijo estar en la oposición a todos -dice-. El escritor, el artista, debería estar por encima y debería usar sabiamente su poder, el poder de su inteligencia, de sus palabras, de su verbo, de sus escritos, para criticar a los políticos”.

 El escritor y periodismo peruano dedicó varios videos a recordar episodios y anécdotas de la vida y obra del Premio Nobel, a una semana de su muerte  LA NACION

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba
Cerrar