NacionalesUltimas Noticias

Llega al país la droga de Hollywood: quiénes no pueden usar Wegovy para bajar de peso, según los especialistas

Como la noticia era muy esperada, los especialistas están convencidos de que la llegada de Wegovy, semaglutida 2,4 mg revolucionará la forma de bajar de peso en la Argentina, a la vez que desatará una enorme demanda y una ola de preguntas en sus consultorios. Pero advierten que este enorme interés podría superar las expectativas reales, ya que vuelven a aclarar que el abordaje farmacológico es solo una parte del tratamiento, un dato que no se cansan de repetir, pero que muchos parecieran no escuchar. Por algo se la llama “la droga mágica de Hollywood”.

Aunque significa un salto enorme en cuanto a terapias para descenso de peso, ya que ayuda no solo al querer bajar, sino también a poder sostener el tratamiento, requiere para ser efectivo un cambio de estilo de vida, en cuanto a la alimentación y al ejercicio físico. De no ser así, una vez suspendido el medicamento, se recuperarían los kilos perdidos. Los especialistas también insisten en un dato que muchos pacientes no tienen en cuenta: no debe usarse sin un control médico, ya que puede producir efectos indeseados, como distensión abdominal, gases, nauseas o vómitos, entre otros.

¿Cómo funciona?

“Esta droga opera sobre el sistema nervioso central y el periférico y logra generar cambios conductuales porque modifica a nivel del cerebro y del estómago la sensación de saciedad. También la sensación de hambre emocional, ese picoteo constante, hábito que tanto cuesta modificar en las personas con sobrepeso. Es una herramienta muy interesante porque quien lucha con el sobrepeso no es que no sabe lo que tiene que hacer, sino que por alguna razón no lo puede hacer. Este tratamiento logra muy buenos resultados en ese sentido porque, al lentificar el vaciamiento del estómago, aumenta la sensación de saciedad”, explica la médica Mónica Katz, especialista en nutrición y expresidenta de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN).

“Realmente estamos entusiasmados, es una herramienta excelente. Vivir con exceso de grasa es vivir con un riesgo renocardiometabólico. La obesidad es una enfermedad crónica y metabólica e inflamatoria. Esa grasa infiltra el corazón y da enfermedad cardiovascular. Infiltra el cerebro y da deterioro cognitivo, Alzheimer y Parkinson. Infiltra los riñones con una enfermedad renal crónica que puede llegar a diálisis. Infiltra el páncreas y da diabetes. Infiltra el hígado y da fibrosis, además de grasa hepática que puede dar fibrosis hepática, cirrosis. Por eso, contar en la Argentina con el fármaco específico que ataca esto es fantástico. Además, hay evidencia de que logra disminuir el ACV no mortal y el infarto no fatal en el 20% de los casos. Por eso, estamos muy entusiasmados y esperemos que esto sea bien usado por aquellas personas que lo necesitan”, detalla Katz.

“Este fármaco es un antes y un después tanto para la diabetes como para la obesidad, ya que vino a poner una pata más en el tratamiento, porque hasta ahora carecíamos de medicamentos que pudieran ayudarnos desde el punto de vista farmacológico”, afirma Laura Maffei, endocrinóloga de amplia trayectoria y directora de Maffei Centro Médico e Investigación Clínica Aplicada. “Nosotros hemos participado de ensayos clínicos con semaglutida, tuvimos acceso a la medicación desde sus orígenes, por eso la conocemos bien. Un punto interesante, entre las contras, acá en la Argentina los medicamentos son muy caros y la semaglutida que contiene Wegovy particularmente es cara. La gente piensa ‘Me compro la jeringa y la uso 15 días o un mes’. Pero realmente este es un tratamiento a largo plazo, de por lo menos un año, donde lo farmacológico es solo una pata, además de la alimentación y el ejercicio físico”, agrega.

Wegovy
medicamento para adelgazar del laboratorio Novo Nordisk

Analía Yamaguchi, médica clínica especialista en nutrición del Hospital Italiano también pone el alerta ante la creencia de que es una droga mágica. “Lo que se vio es que a 16 semanas de tratamiento se baja entre 5% y 15% del peso inicial. Ahora, solo inyectándome no, esto es en el contexto de una alimentación saludable y actividad física. El problema es cuando se piensa que es la droga mágica, que te la inyectás y te convertís en una celebrity. Hay que trabajar en la consulta la ansiedad de tener ese cuerpo. Los cambios solo van a llegar si hay un cambio de conductas”, apunta.

¿Cómo funciona el cerebro en personas con obesidad?

Katz describe la clave del éxito de este medicamento. “La mayoría de las personas que desarrollan obesidad tienen características neurocognitivas especiales. Este fármaco actúa en dos regiones del cerebro: lo primero que hace es activar y estimular las zonas frontoparietales, que son las encargadas, entre otras cosas, de inhibir comportamientos”, detalla la médica nutricionista. En este caso, el comportamiento que va a inhibir es el comer. “Enciende la corteza frontoparietal para que la persona pueda parar de comer. Lo segundo que hace es disminuir la enorme sensibilidad de los sistemas de recompensa de las áreas de placer que están muy encendidas en una persona que vive con obesidad. Quiere decir que, si se logra revertir la enorme sensibilidad a la vista, al olor, a la imaginación o evocación de comida, y a la vez logra corregir el delay de la zona frontal que se encarga de inhibir el comportamiento comer, se logra una mejora en lo que se denomina autorregulación alimentaria”, añade.

El hecho de que haya demorado tanto tiempo en llegar efectivamente al país esta droga para adelgazar, vinculado a la falta de disponibilidad, aportó una ventaja indirecta con respecto al uso en otros países, que es contar con más evidencia científica sobre los beneficios y efectos adversos.

“Sin querer, la droga llega a la Argentina con una vasta experiencia y con los protocolos STEP (Efecto del Tratamiento con Semaglutida en Personas con Obesidad, por sus siglas en inglés). Hoy, está muy probado su uso en personas con sobrepeso, con obesidad, en diabetes, en adolescentes. Está aprobado en Europa, Estados Unidos, Brasil, en América Latina. Esto nos permite prescribir un fármaco muy seguro y con una efectividad probada”, dice Katz.

¿Existen contraindicaciones?

Un informe publicado en enero de 2024 en la prestigiosa revista The Lancet, titulado Tratamiento de la obesidad y la diabetes: los medicamentos por sí solos no son suficientes, advierte: “Una simple pastilla o inyección sin duda ayudará a algunos pacientes, pero no puede ser la única base para abordar las complejidades de la obesidad”. Agrega que una reciente publicación informa sobre una asociación entre el uso de agonistas del GLP-1 para la pérdida de peso y el riesgo de pancreatitis, gastroparesia y obstrucción intestinal.

“Existe poca o ninguna información sobre la seguridad de tomar estos fármacos a largo plazo. Estas preocupaciones se vuelven más apremiantes a medida que se intensifica la posibilidad de ampliar las indicaciones. (…) Inevitablemente, estos fármacos se han utilizado no solo por indicación médica, sino también cuando alguien simplemente desea perder algunos kilos. (…) Es fundamental realizar estudios de vigilancia a largo plazo sobre los riesgos y beneficios”, dice. Y agrega: “Los costos de estos medicamentos también son una pregunta viva. La pérdida de peso solo se mantiene mientras se toman los medicamentos; una vez que el tratamiento se detiene, el peso se puede recuperar y, por lo tanto, los costos del tratamiento crónico”.

¿Cuáles son los riesgos reales?

“Algo importante a tener en cuenta: si un familiar o el paciente tiene antecedentes de cáncer de tiroides o nódulos, preguntar antes al médico si puede usar esta droga, porque hay algunos de otras marcas que generaron en ratones cáncer de tiroides. No está demostrado en humanos, pero la advertencia siempre está“, sostiene Yamaguchi.

“Como todo, tiene efectos secundarios. Como actúa enlenteciendo el vaciado gástrico, en algunas personas puede ser intenso y traer problemas”, subraya Maffei. Y detalla: “Hay personas en las que puede estar contraindicado, por ejemplo quienes sufrieron de pancreatitis. Allí las contraindicaciones son importantes. O quienes sufrieron una rinopatía diabética, tampoco deberían usarlo”.

Entre los efectos secundarios, Yamaguchi cita náuseas, vómitos, diarreas, alergias. Y hace una advertencia sobre el uso potencialmente peligroso en personas con problemas de salud mental: “Yo recomiendo tener cuidado también con las ideas suicidas, porque hay algunos apartados, no con esta droga, pero sí con similares. Si la persona tiene problemas de salud mental o le cambian las ideas, empieza con el tratamiento farmacológico y empieza con depresión, hay que tenerlo siempre en cuenta”, explica. También siembra una alerta sobre el mercado negro de la droga para adelgazar, ya sea que se consiga por canales no oficiales como que se indique fuera de una supervisión médica.

Como la noticia era muy esperada, los especialistas están convencidos de que la llegada de Wegovy, semaglutida 2,4 mg revolucionará la forma de bajar de peso en la Argentina, a la vez que desatará una enorme demanda y una ola de preguntas en sus consultorios. Pero advierten que este enorme interés podría superar las expectativas reales, ya que vuelven a aclarar que el abordaje farmacológico es solo una parte del tratamiento, un dato que no se cansan de repetir, pero que muchos parecieran no escuchar. Por algo se la llama “la droga mágica de Hollywood”.

Aunque significa un salto enorme en cuanto a terapias para descenso de peso, ya que ayuda no solo al querer bajar, sino también a poder sostener el tratamiento, requiere para ser efectivo un cambio de estilo de vida, en cuanto a la alimentación y al ejercicio físico. De no ser así, una vez suspendido el medicamento, se recuperarían los kilos perdidos. Los especialistas también insisten en un dato que muchos pacientes no tienen en cuenta: no debe usarse sin un control médico, ya que puede producir efectos indeseados, como distensión abdominal, gases, nauseas o vómitos, entre otros.

¿Cómo funciona?

“Esta droga opera sobre el sistema nervioso central y el periférico y logra generar cambios conductuales porque modifica a nivel del cerebro y del estómago la sensación de saciedad. También la sensación de hambre emocional, ese picoteo constante, hábito que tanto cuesta modificar en las personas con sobrepeso. Es una herramienta muy interesante porque quien lucha con el sobrepeso no es que no sabe lo que tiene que hacer, sino que por alguna razón no lo puede hacer. Este tratamiento logra muy buenos resultados en ese sentido porque, al lentificar el vaciamiento del estómago, aumenta la sensación de saciedad”, explica la médica Mónica Katz, especialista en nutrición y expresidenta de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN).

“Realmente estamos entusiasmados, es una herramienta excelente. Vivir con exceso de grasa es vivir con un riesgo renocardiometabólico. La obesidad es una enfermedad crónica y metabólica e inflamatoria. Esa grasa infiltra el corazón y da enfermedad cardiovascular. Infiltra el cerebro y da deterioro cognitivo, Alzheimer y Parkinson. Infiltra los riñones con una enfermedad renal crónica que puede llegar a diálisis. Infiltra el páncreas y da diabetes. Infiltra el hígado y da fibrosis, además de grasa hepática que puede dar fibrosis hepática, cirrosis. Por eso, contar en la Argentina con el fármaco específico que ataca esto es fantástico. Además, hay evidencia de que logra disminuir el ACV no mortal y el infarto no fatal en el 20% de los casos. Por eso, estamos muy entusiasmados y esperemos que esto sea bien usado por aquellas personas que lo necesitan”, detalla Katz.

“Este fármaco es un antes y un después tanto para la diabetes como para la obesidad, ya que vino a poner una pata más en el tratamiento, porque hasta ahora carecíamos de medicamentos que pudieran ayudarnos desde el punto de vista farmacológico”, afirma Laura Maffei, endocrinóloga de amplia trayectoria y directora de Maffei Centro Médico e Investigación Clínica Aplicada. “Nosotros hemos participado de ensayos clínicos con semaglutida, tuvimos acceso a la medicación desde sus orígenes, por eso la conocemos bien. Un punto interesante, entre las contras, acá en la Argentina los medicamentos son muy caros y la semaglutida que contiene Wegovy particularmente es cara. La gente piensa ‘Me compro la jeringa y la uso 15 días o un mes’. Pero realmente este es un tratamiento a largo plazo, de por lo menos un año, donde lo farmacológico es solo una pata, además de la alimentación y el ejercicio físico”, agrega.

Wegovy
medicamento para adelgazar del laboratorio Novo Nordisk

Analía Yamaguchi, médica clínica especialista en nutrición del Hospital Italiano también pone el alerta ante la creencia de que es una droga mágica. “Lo que se vio es que a 16 semanas de tratamiento se baja entre 5% y 15% del peso inicial. Ahora, solo inyectándome no, esto es en el contexto de una alimentación saludable y actividad física. El problema es cuando se piensa que es la droga mágica, que te la inyectás y te convertís en una celebrity. Hay que trabajar en la consulta la ansiedad de tener ese cuerpo. Los cambios solo van a llegar si hay un cambio de conductas”, apunta.

¿Cómo funciona el cerebro en personas con obesidad?

Katz describe la clave del éxito de este medicamento. “La mayoría de las personas que desarrollan obesidad tienen características neurocognitivas especiales. Este fármaco actúa en dos regiones del cerebro: lo primero que hace es activar y estimular las zonas frontoparietales, que son las encargadas, entre otras cosas, de inhibir comportamientos”, detalla la médica nutricionista. En este caso, el comportamiento que va a inhibir es el comer. “Enciende la corteza frontoparietal para que la persona pueda parar de comer. Lo segundo que hace es disminuir la enorme sensibilidad de los sistemas de recompensa de las áreas de placer que están muy encendidas en una persona que vive con obesidad. Quiere decir que, si se logra revertir la enorme sensibilidad a la vista, al olor, a la imaginación o evocación de comida, y a la vez logra corregir el delay de la zona frontal que se encarga de inhibir el comportamiento comer, se logra una mejora en lo que se denomina autorregulación alimentaria”, añade.

El hecho de que haya demorado tanto tiempo en llegar efectivamente al país esta droga para adelgazar, vinculado a la falta de disponibilidad, aportó una ventaja indirecta con respecto al uso en otros países, que es contar con más evidencia científica sobre los beneficios y efectos adversos.

“Sin querer, la droga llega a la Argentina con una vasta experiencia y con los protocolos STEP (Efecto del Tratamiento con Semaglutida en Personas con Obesidad, por sus siglas en inglés). Hoy, está muy probado su uso en personas con sobrepeso, con obesidad, en diabetes, en adolescentes. Está aprobado en Europa, Estados Unidos, Brasil, en América Latina. Esto nos permite prescribir un fármaco muy seguro y con una efectividad probada”, dice Katz.

¿Existen contraindicaciones?

Un informe publicado en enero de 2024 en la prestigiosa revista The Lancet, titulado Tratamiento de la obesidad y la diabetes: los medicamentos por sí solos no son suficientes, advierte: “Una simple pastilla o inyección sin duda ayudará a algunos pacientes, pero no puede ser la única base para abordar las complejidades de la obesidad”. Agrega que una reciente publicación informa sobre una asociación entre el uso de agonistas del GLP-1 para la pérdida de peso y el riesgo de pancreatitis, gastroparesia y obstrucción intestinal.

“Existe poca o ninguna información sobre la seguridad de tomar estos fármacos a largo plazo. Estas preocupaciones se vuelven más apremiantes a medida que se intensifica la posibilidad de ampliar las indicaciones. (…) Inevitablemente, estos fármacos se han utilizado no solo por indicación médica, sino también cuando alguien simplemente desea perder algunos kilos. (…) Es fundamental realizar estudios de vigilancia a largo plazo sobre los riesgos y beneficios”, dice. Y agrega: “Los costos de estos medicamentos también son una pregunta viva. La pérdida de peso solo se mantiene mientras se toman los medicamentos; una vez que el tratamiento se detiene, el peso se puede recuperar y, por lo tanto, los costos del tratamiento crónico”.

¿Cuáles son los riesgos reales?

“Algo importante a tener en cuenta: si un familiar o el paciente tiene antecedentes de cáncer de tiroides o nódulos, preguntar antes al médico si puede usar esta droga, porque hay algunos de otras marcas que generaron en ratones cáncer de tiroides. No está demostrado en humanos, pero la advertencia siempre está“, sostiene Yamaguchi.

“Como todo, tiene efectos secundarios. Como actúa enlenteciendo el vaciado gástrico, en algunas personas puede ser intenso y traer problemas”, subraya Maffei. Y detalla: “Hay personas en las que puede estar contraindicado, por ejemplo quienes sufrieron de pancreatitis. Allí las contraindicaciones son importantes. O quienes sufrieron una rinopatía diabética, tampoco deberían usarlo”.

Entre los efectos secundarios, Yamaguchi cita náuseas, vómitos, diarreas, alergias. Y hace una advertencia sobre el uso potencialmente peligroso en personas con problemas de salud mental: “Yo recomiendo tener cuidado también con las ideas suicidas, porque hay algunos apartados, no con esta droga, pero sí con similares. Si la persona tiene problemas de salud mental o le cambian las ideas, empieza con el tratamiento farmacológico y empieza con depresión, hay que tenerlo siempre en cuenta”, explica. También siembra una alerta sobre el mercado negro de la droga para adelgazar, ya sea que se consiga por canales no oficiales como que se indique fuera de una supervisión médica.

 Si bien puede usarse para tratar tanto obesidad como sobrepeso, existen ciertos diagnósticos previos ante los que puede estar desaconsejada  LA NACION

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba
Cerrar