Caputo proyecta salir del cepo cambiario el año próximo
Así como el presidente Javier Milei eligió a su propio enemigo, la casta, el ministro de Economía, Luis Caputo, también escogió a su rival: el escepticismo sobre la Argentina. Este último es menos marketinero porque sus resultados no se reflejan en las urnas, pero sí podría derivar en baja de impuestos, que es el horizonte de su plan, según aseguró el ministro.
En esa puja contra la incertidumbre, Caputo participó de la Conferencia Anual de FIEL y les pidió “que confíen” a los empresarios, inversores y economistas allí presentes. Por lo tanto, delimitó algunos trazos de su plan vinculados al cepo, la quita de impuestos y las conversaciones con el FMI, a fin de explicar hacia donde planea llevar la economía argentina.
El “famoso” tema del cepo, como lo abordó el ministro, tuvo varias aristas. “Nadie puede dudar que hoy estamos en el mejor momento en términos de salir del cepo”, arrancó. Y enumeró algunos factores que explican esta situación, como la inflación cercana al 2% del crawling peg y “la brecha cambiaria en valores mínimos”. Sin embargo, el ministro expresó que proyecta una salida para “el año que viene”. De hecho, no se mostró para nada ansioso, sino que habló del tiempo como un aliado del Gobierno.
“A medida que pasa el tiempo, más dejamos atrás los efectos negativos de la horrible política monetaria del gobierno anterior, y más prevalece nuestra política monetaria”, indicó. Incluso, opinó que “no es cierto” que no se pueda crecer con cepo y reiteró que “para nosotros el año que viene vamos a estar creciendo al 5% o más”.
Además, Caputo adelantó que las estadísticas oficiales de octubre mostrarán “un superávit financiero importante”. Este no es un dato menor para el Gobierno, ya que consolida el ancla fiscal del programa económico y porque el ministro comenzó a hablar de una posible recompensa en caso de combinar más equilibro y crecimiento: la baja de impuestos.
“Tenemos que empezar a crecer para devolverle a la gente esa plata en baja de impuestos”, afirmó. En ese sentido, mencionó algunos impuestos que están en su mira: “las retenciones, débitos y créditos e Ingresos Brutos (de carácter provincial)”, concluyó.
Así como el presidente Javier Milei eligió a su propio enemigo, la casta, el ministro de Economía, Luis Caputo, también escogió a su rival: el escepticismo sobre la Argentina. Este último es menos marketinero porque sus resultados no se reflejan en las urnas, pero sí podría derivar en baja de impuestos, que es el horizonte de su plan, según aseguró el ministro.
En esa puja contra la incertidumbre, Caputo participó de la Conferencia Anual de FIEL y les pidió “que confíen” a los empresarios, inversores y economistas allí presentes. Por lo tanto, delimitó algunos trazos de su plan vinculados al cepo, la quita de impuestos y las conversaciones con el FMI, a fin de explicar hacia donde planea llevar la economía argentina.
El “famoso” tema del cepo, como lo abordó el ministro, tuvo varias aristas. “Nadie puede dudar que hoy estamos en el mejor momento en términos de salir del cepo”, arrancó. Y enumeró algunos factores que explican esta situación, como la inflación cercana al 2% del crawling peg y “la brecha cambiaria en valores mínimos”. Sin embargo, el ministro expresó que proyecta una salida para “el año que viene”. De hecho, no se mostró para nada ansioso, sino que habló del tiempo como un aliado del Gobierno.
“A medida que pasa el tiempo, más dejamos atrás los efectos negativos de la horrible política monetaria del gobierno anterior, y más prevalece nuestra política monetaria”, indicó. Incluso, opinó que “no es cierto” que no se pueda crecer con cepo y reiteró que “para nosotros el año que viene vamos a estar creciendo al 5% o más”.
Además, Caputo adelantó que las estadísticas oficiales de octubre mostrarán “un superávit financiero importante”. Este no es un dato menor para el Gobierno, ya que consolida el ancla fiscal del programa económico y porque el ministro comenzó a hablar de una posible recompensa en caso de combinar más equilibro y crecimiento: la baja de impuestos.
“Tenemos que empezar a crecer para devolverle a la gente esa plata en baja de impuestos”, afirmó. En ese sentido, mencionó algunos impuestos que están en su mira: “las retenciones, débitos y créditos e Ingresos Brutos (de carácter provincial)”, concluyó.
El ministro de Economía afirmó que proyecta la salida del cepo para el año que viene; además confirmó que octubre tuvo un “superávit importante” y adelantó cuáles son los impuestos que tiene en la mira LA NACION