El paro del transporte se refuerza con la adhesión de más gremios y los piqueteros
La alianza de gremios del transporte refuerza el paro sectorial que activará mañana con la adhesión de más sindicatos y de los movimientos sociales, que ya advirtieron que cortarán calles y desplegarán ollas populares en distintos puntos del país.
La protesta de los transportistas, que durará 24 horas, afectará el normal funcionamiento de trenes, aviones, camiones, barcos y la actividad portuaria. Perderá impacto porque la conducción nacional del gremio de los colectiveros de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) desistió de sumarse al reclamo, aunque habrá seccionales opositoras al liderazgo de Roberto Fernández que evalúan plegarse.
Al margen de los transportistas, habrá otros sectores que se sumarán a la medida de fuerza de mañana. La Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), que lidera Alejandro Gramajo, un aliado de Juan Grabois, ya dispuso que movilizará a sus militantes. “Este miércoles 30 llevaremos adelante una jornada nacional de lucha contra el hambre en el marco del paro de transporte, junto a varias organizaciones sindicales y sociales, para visibilizar la situación crítica que viven millones de familias trabajadoras”, informó el gremio de trabajadores de la economía popular, cuyo titular visitó al papa Francisco en el Vaticano hace un mes.
La UTEP desplegará ollas populares en diversos puntos de la Capital Federal y el conurbano bonaerense. Por ejemplo, tiene previsto hacerlo en conjunto con militantes del Sindicato de Camioneros en Plaza Constitución, donde la actividad será más reducida por la parálisis de los trenes y subtes, pero habrá movimiento por los colectivos.
El denominado “Frente de Lucha Piquetero”, que tiene entre sus integrantes principales al Polo Obrero (que lidera Eduardo Belliboni), anunció una “Jornada Nacional contra el Hambre”, que incluirá cortes de calle en la ciudad de La Plata y en otros puntos del país. A las 10, se concentrarán en la rotonda de la autopista Buenos Aires La Plata. Adelantaron que también se congregarán en esquinas platenses como las de 520 y 161, 44 y 155, y 25 y 72.
La organización Libres del Sur, que tiene como referentes a Humberto Tumini y a Silvia Saravia, anunció que protestará desde las 10, en el Obelisco, y que una hora más tarde protagonizará una concentración en Constitución. En un comunicado, Libres del Sur aseguró que replicará las protestas en “10 puntos del conurbano y en todo el país”.
Desde Barrios de Pie, la organización que conduce el funcionario bonaerense Daniel Menéndez, anunciaron su participación en distintos cortes de tránsito. La agenda en el conurbano incluye, entre otros puntos, el Cruce Varela, la rotonda de Llavallol, el cruce de Panamericana y 197, de la ruta 3 y las vías (La Matanza), la sede de Mercado Libre en Villa Celina y la esquina de la avenida Rodolfo López y Camino General Belgrano (Quilmes).
También se sumarán las dos vertientes de la CTA, que encabezan Hugo Yasky y Hugo Godoy. “La medida se llevará a cabo con paro de actividades en algunas regionales y sindicatos y diversas acciones territoriales junto a los movimientos sociales”, informaron las dos centrales a través de un comunicado conjunto que exhibe que la reunificación está cada vez más cerca después de 14 años de fractura. Las CTA garantizan acatamiento en sectores públicos y docentes. “Nos manifestamos en unidad para rechazar el ajuste del gobierno de Milei que, lejos de afectar a la casta, castiga a las mayorías populares con tarifazos, pérdida de poder adquisitivo, despidos, ataque generalizado a los derechos consagrados en nuestra Constitución y una brutal recesión económica que ya está generando destrucción del empleo y cierre de pequeñas y mediana empresas. Los únicos sectores beneficiados con la política de Milei son los grandes grupos económicos y los operadores financieros”, plantearon los referentes ceteístas.
Adhieren también otros gremios en conflicto con el Gobierno, como los estatales de ATE, que extendieron el paro sectorial que comenzó hoy a 36 horas para reforzar la medida de los transportistas. Se sumarán los gremios del personal de la AFIP y de Aduanas, que rechazan los fuertes cambios y despidos anunciados en esas áreas, además de gremios moyanistas como motoqueros, empleados del vidrio y viales.
Pablo Moyano, uno de los tres jefes que tiene hoy la CGT, condicionó su futuro en el triunvirato a la espera de una reacción corporativa en contra del Gobierno. “Después del 30 de octubre se decidirá la situación del sector que representamos, si continuar en la CGT o proponer una profundización del plan de lucha que arrancó con el paro de enero. No hay otra alternativa que un paro general”, dijo Moyano en declaraciones a Futurock.
Si la protesta de los transportistas es contundente, Moyano irá al consejo directivo cegetista para presionar por otra huelga, la tercera contra la gestión de Milei. Sus rivales internos en la CGT tomaron distancia del reclamo de los transportistas y ven por ahora lejos la posibilidad de avanzar hacia otro paro contra la gestión libertaria.
El Gobierno, a través del vocero presidencial, relativizó la protesta de los transportistas. “Paran los privilegidos, los que pueden darse el lujo de parar. Van a perjudicar a los que quieren trabajar. El Gobierno no pudo evitar el paro porque el pedido de conciliación lo tiene que hacer un privado”, dijo Manuel Adorni, en conferencia de prensa, desde la Casa Rosada. De esta manera, el oficialismo se muestra decidido a confrontar con estos gremios, aunque tiene una negociación en curso con la Unión Tranviarios Automotor (UTA) con el objetivo de desactivar el paro de colectivos previsto para el jueves próximo.
La alianza de gremios del transporte refuerza el paro sectorial que activará mañana con la adhesión de más sindicatos y de los movimientos sociales, que ya advirtieron que cortarán calles y desplegarán ollas populares en distintos puntos del país.
La protesta de los transportistas, que durará 24 horas, afectará el normal funcionamiento de trenes, aviones, camiones, barcos y la actividad portuaria. Perderá impacto porque la conducción nacional del gremio de los colectiveros de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) desistió de sumarse al reclamo, aunque habrá seccionales opositoras al liderazgo de Roberto Fernández que evalúan plegarse.
Al margen de los transportistas, habrá otros sectores que se sumarán a la medida de fuerza de mañana. La Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), que lidera Alejandro Gramajo, un aliado de Juan Grabois, ya dispuso que movilizará a sus militantes. “Este miércoles 30 llevaremos adelante una jornada nacional de lucha contra el hambre en el marco del paro de transporte, junto a varias organizaciones sindicales y sociales, para visibilizar la situación crítica que viven millones de familias trabajadoras”, informó el gremio de trabajadores de la economía popular, cuyo titular visitó al papa Francisco en el Vaticano hace un mes.
La UTEP desplegará ollas populares en diversos puntos de la Capital Federal y el conurbano bonaerense. Por ejemplo, tiene previsto hacerlo en conjunto con militantes del Sindicato de Camioneros en Plaza Constitución, donde la actividad será más reducida por la parálisis de los trenes y subtes, pero habrá movimiento por los colectivos.
El denominado “Frente de Lucha Piquetero”, que tiene entre sus integrantes principales al Polo Obrero (que lidera Eduardo Belliboni), anunció una “Jornada Nacional contra el Hambre”, que incluirá cortes de calle en la ciudad de La Plata y en otros puntos del país. A las 10, se concentrarán en la rotonda de la autopista Buenos Aires La Plata. Adelantaron que también se congregarán en esquinas platenses como las de 520 y 161, 44 y 155, y 25 y 72.
La organización Libres del Sur, que tiene como referentes a Humberto Tumini y a Silvia Saravia, anunció que protestará desde las 10, en el Obelisco, y que una hora más tarde protagonizará una concentración en Constitución. En un comunicado, Libres del Sur aseguró que replicará las protestas en “10 puntos del conurbano y en todo el país”.
Desde Barrios de Pie, la organización que conduce el funcionario bonaerense Daniel Menéndez, anunciaron su participación en distintos cortes de tránsito. La agenda en el conurbano incluye, entre otros puntos, el Cruce Varela, la rotonda de Llavallol, el cruce de Panamericana y 197, de la ruta 3 y las vías (La Matanza), la sede de Mercado Libre en Villa Celina y la esquina de la avenida Rodolfo López y Camino General Belgrano (Quilmes).
También se sumarán las dos vertientes de la CTA, que encabezan Hugo Yasky y Hugo Godoy. “La medida se llevará a cabo con paro de actividades en algunas regionales y sindicatos y diversas acciones territoriales junto a los movimientos sociales”, informaron las dos centrales a través de un comunicado conjunto que exhibe que la reunificación está cada vez más cerca después de 14 años de fractura. Las CTA garantizan acatamiento en sectores públicos y docentes. “Nos manifestamos en unidad para rechazar el ajuste del gobierno de Milei que, lejos de afectar a la casta, castiga a las mayorías populares con tarifazos, pérdida de poder adquisitivo, despidos, ataque generalizado a los derechos consagrados en nuestra Constitución y una brutal recesión económica que ya está generando destrucción del empleo y cierre de pequeñas y mediana empresas. Los únicos sectores beneficiados con la política de Milei son los grandes grupos económicos y los operadores financieros”, plantearon los referentes ceteístas.
Adhieren también otros gremios en conflicto con el Gobierno, como los estatales de ATE, que extendieron el paro sectorial que comenzó hoy a 36 horas para reforzar la medida de los transportistas. Se sumarán los gremios del personal de la AFIP y de Aduanas, que rechazan los fuertes cambios y despidos anunciados en esas áreas, además de gremios moyanistas como motoqueros, empleados del vidrio y viales.
Pablo Moyano, uno de los tres jefes que tiene hoy la CGT, condicionó su futuro en el triunvirato a la espera de una reacción corporativa en contra del Gobierno. “Después del 30 de octubre se decidirá la situación del sector que representamos, si continuar en la CGT o proponer una profundización del plan de lucha que arrancó con el paro de enero. No hay otra alternativa que un paro general”, dijo Moyano en declaraciones a Futurock.
Si la protesta de los transportistas es contundente, Moyano irá al consejo directivo cegetista para presionar por otra huelga, la tercera contra la gestión de Milei. Sus rivales internos en la CGT tomaron distancia del reclamo de los transportistas y ven por ahora lejos la posibilidad de avanzar hacia otro paro contra la gestión libertaria.
El Gobierno, a través del vocero presidencial, relativizó la protesta de los transportistas. “Paran los privilegidos, los que pueden darse el lujo de parar. Van a perjudicar a los que quieren trabajar. El Gobierno no pudo evitar el paro porque el pedido de conciliación lo tiene que hacer un privado”, dijo Manuel Adorni, en conferencia de prensa, desde la Casa Rosada. De esta manera, el oficialismo se muestra decidido a confrontar con estos gremios, aunque tiene una negociación en curso con la Unión Tranviarios Automotor (UTA) con el objetivo de desactivar el paro de colectivos previsto para el jueves próximo.
Los movimientos sociales vinculados al kirchnerismo y a la izquierda activarán cortes y se sumarán a la protesta de los transportistas LA NACION