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Atlético de Madrid, de la mano de Giuliano Simeone y Julián Álvarez, torció el rumbo ante Leganés y se impuso por 3-1

Un movimiento acertado torció el rumbo. Con acento argentino, con la energía exacta y con una calidad indiscutible. Julián Álvarez, Rodrigo De Paul y Giuliano Simeone, cuando pisaron el campo de juego en el segundo tiempo, le cambiaron el semblante a Atlético de Madrid y le permitieron al equipo colchonero dar vuelta un resultado desfavorable ante Leganés para imponerse por 3-1, con una jugada y asistencia del hijo de Diego Simeone y otra gran acción del delantero argentino que resultaron determinantes para sumar de a tres lo que le permite mantenerse al acecho de Real Madrid y el líder Barcelona.

Fueron casi 60 minutos en los que Atlético de Madrid quedó opacado por la tarea de Leganés. El conjunto visitante impuso condiciones, no lo dejó crecer ofensivamente y en cada avance llenó de temores al equipo de Simeone. La derrota parcial por 1-0 por un gol de Yvan Neyou, puso impacientes a los hinchas del conjunto madrileño que veía que el equipo no reaccionaba.

El que también advirtió que el desempeño de sus muchachos estaba lejos del ideal y que su propuesta inicial no fue la acertada fue el entrenador argentino, porque a los 11 minutos del segundo tiempo el Cholo decidió mandar a la armada argentina a la cancha y con Julián Álvarez, De Paul y Giuliano Simeone, cambió por completo el deseo de Atlético por dar vuelta el resultado.

Los abanderados de ese cambio fueron Julián y Giuliano que demostraron que son incansables cuando se trata de aportar ofensivamente. Es que tras el empate de Alexander Sørloth, que definió de taco tras una asistencia de Axel Witsel, llegó la jugada de Simeone que cambió todo. Es que el hijo del Cholo fue a buscar una pelota que parecía perdida, la mantuvo en juego, llegó al fondo y sacó un centro-pase a ras de piso para que Antoine Griezmann pudiera marcar el 2-1. Con esa conquista, el francés llegó a los 191 goles en La Liga (3 en esta temporada) y está a 5 de superar a Mundo (Edmundo Suárez), en el undécimo puesto de máximos anotadores del campeonato español.

Como nunca se conforma, Atlético fue por más y en ese contexto, el empuje y la claridad de De Paul le dieron más juego al equipo del Cholo Simeone y la tenacidad de Julián Álvarez terminó por resolver una victoria necesaria para el conjunto colchonero. Es que el ex delantero de Manchester City demostró por qué es uno de los atacantes más peligrosos e incansables del mundo: luchó una pelota en el área que le permitió nuevamente a Sørloth marcar y poner el 3-1 definitivo.

Con este resultado, los colchoneros suman 20 puntos y están a cuatro unidades de Real Madrid y Barcelona, que juega esta tarde, desde las 16, hora de la Argentina, ante Sevilla. El próximo partido de Atlético Madrid será ante el Lille, el miércoles próximo, en la jornada 3 de Champions League.

La síntesis

Las posiciones

Un movimiento acertado torció el rumbo. Con acento argentino, con la energía exacta y con una calidad indiscutible. Julián Álvarez, Rodrigo De Paul y Giuliano Simeone, cuando pisaron el campo de juego en el segundo tiempo, le cambiaron el semblante a Atlético de Madrid y le permitieron al equipo colchonero dar vuelta un resultado desfavorable ante Leganés para imponerse por 3-1, con una jugada y asistencia del hijo de Diego Simeone y otra gran acción del delantero argentino que resultaron determinantes para sumar de a tres lo que le permite mantenerse al acecho de Real Madrid y el líder Barcelona.

Fueron casi 60 minutos en los que Atlético de Madrid quedó opacado por la tarea de Leganés. El conjunto visitante impuso condiciones, no lo dejó crecer ofensivamente y en cada avance llenó de temores al equipo de Simeone. La derrota parcial por 1-0 por un gol de Yvan Neyou, puso impacientes a los hinchas del conjunto madrileño que veía que el equipo no reaccionaba.

El que también advirtió que el desempeño de sus muchachos estaba lejos del ideal y que su propuesta inicial no fue la acertada fue el entrenador argentino, porque a los 11 minutos del segundo tiempo el Cholo decidió mandar a la armada argentina a la cancha y con Julián Álvarez, De Paul y Giuliano Simeone, cambió por completo el deseo de Atlético por dar vuelta el resultado.

Los abanderados de ese cambio fueron Julián y Giuliano que demostraron que son incansables cuando se trata de aportar ofensivamente. Es que tras el empate de Alexander Sørloth, que definió de taco tras una asistencia de Axel Witsel, llegó la jugada de Simeone que cambió todo. Es que el hijo del Cholo fue a buscar una pelota que parecía perdida, la mantuvo en juego, llegó al fondo y sacó un centro-pase a ras de piso para que Antoine Griezmann pudiera marcar el 2-1. Con esa conquista, el francés llegó a los 191 goles en La Liga (3 en esta temporada) y está a 5 de superar a Mundo (Edmundo Suárez), en el undécimo puesto de máximos anotadores del campeonato español.

Como nunca se conforma, Atlético fue por más y en ese contexto, el empuje y la claridad de De Paul le dieron más juego al equipo del Cholo Simeone y la tenacidad de Julián Álvarez terminó por resolver una victoria necesaria para el conjunto colchonero. Es que el ex delantero de Manchester City demostró por qué es uno de los atacantes más peligrosos e incansables del mundo: luchó una pelota en el área que le permitió nuevamente a Sørloth marcar y poner el 3-1 definitivo.

Con este resultado, los colchoneros suman 20 puntos y están a cuatro unidades de Real Madrid y Barcelona, que juega esta tarde, desde las 16, hora de la Argentina, ante Sevilla. El próximo partido de Atlético Madrid será ante el Lille, el miércoles próximo, en la jornada 3 de Champions League.

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Las posiciones

 Los argentinos ingresaron en el segundo tiempo y resultaron determinantes en dos de las tres conquistas  LA NACION

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