Solo en Off: el jefe de los espías y un inesperado gesto de acercamiento con China
“¿Pero no era que no teníamos relaciones de Estado a Estado y sólo nos manejábamos entre privados?”, ironizó uno de los presentes cuando vio entrar al salón del Hotel Sheraton a Sergio Neiffert, jefe de los espías y titular de la resucitada Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
El mediodía del viernes, la embajada de China en Buenos Aires organizó un homenaje por el 97° aniversario de la creación, en 1927, del Ejército Popular de Liberación de China, el gigante asiático donde el Partido Comunista es eje y rector de la vida política y económica del país.
¿Quién gobierna cuando Milei se aburre?
Sin rastros de su jefe político, el asesor todoterreno Santiago Caputo, Neiffert llegó a la celebración militar china junto a algunos colaboradores, como Alejandro Walter Colombo, uno de los cuatro secretarios que tiene el renovado organigrama de la central de inteligencia.
De buen humor, y luego de saludar al embajador Wang Wei, Neiffert conversó con algunos de los invitados, como el secretario de Relaciones Internacionales de Pro, Fulvio Pompeo, o el diputado provincial y exfuncionario bonaerense Fabián Perechodnik.
Nadie quiso contar si los $100.000 millones en fondos reservados, otorgados a la SIDE vía decreto la semana pasada, formaron parte de la conversación. Ajenos a estos diálogos, en otros sectores del salón estaban el excanciller kirchnerista Jorge Taiana, la dirigente del Instituto Patria María del Carmen Alarcón y cuadros del macrismo como Fernando Straface y el exembajador en China, Diego Guelar.
Sin entrar en polémicas, el embajador Wei habló en su discurso de los puntos en común con la Argentina. “Defendemos juntos la paz y la estabilidad del mundo”, dijo Wei, sin menciones al conflicto derivado por las críticas del embajador norteamericano Marc Stanley a la base aeroespacial china en Neuquén, como tampoco a las declaraciones de la canciller Diana Mondino –”los chinos son todos iguales”– o la controversia por el swap de monedas, que Beijing finalmente renovó con la Argentina, sin solicitarle al Gobierno un desembolso que hubiera desequilibrado sus cuentas.
Hombre de las filas del exintendente de Malvinas Argentinas Jesús Cariglino, Neiffert escuchó también al embajador chino afirmar sobre China y la Argentina: “Hemos venido trabajando juntos y hemos tenido una estrecha colaboración en los foros internacionales”. Wei también anticipó que en los próximos años se dará una “profundización de la modernización del estilo chino”, con eje en una “política exterior independiente y de paz”.
Luego de escuchar los discursos y los himnos de ambos países, Neiffert dejó el hotel del barrio de Retiro. Su misión había sido cumplida, más allá de que la anunciada visita de Milei a China no pasó, hasta ahora, de un anuncio extraoficial que voceros del Gobierno se empeñaron en sostener, sin avances concretos.
Zamora rockero, la sorpresa que faltaba
Serio y algo incómodo se lo vio al gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, el 9 de julio pasado, en la Casa Histórica de Tucumán, en la que firmó junto a otros mandatarios el denominado Pacto de Mayo, impulsado por el presidente Javier Milei.
Días después, el gobernador que maneja diez votos estratégicos en el Congreso (siete diputados y tres senadores) dejó una imagen opuesta y a la vez sorprendente, jugando de local y haciendo gala de habilidades musicales desconocidas para el gran público.
En efecto, un Zamora subido sin complejos al escenario, con manejo virtuoso de guitarra eléctrica y armónica, fue uno de los puntos altos de la tradicional y popular Marcha de las Cuerdas y Fuelles, fiestas musicales que el gobernador (¿ex?) kirchnerista puso en marcha en sus épocas de intendente de la capital santiagueña, y que se reeditó días atrás.
“¡Me gustas mucho!”, entonó el gobernador, siguiendo al pie de la letra el tema homónimo, del grupo Viejas Locas, en la que su autor, Cristian “Pity” Alvarez, describe de modo desenfadado virtudes corporales de una persona a la que le declara su amor.
“El gober en modo rock”, titula elizabethcor7, la usuaria de TikTok que subió el video, toda una rareza con miles de visitas interesadas en la performance del mandatario, por lo visto con veta artística escondida.
El ex-CCK tendrá (otro) nuevo nombre: Sarmiento
La discusión fue larga, y según cuentan los que la escucharon, tuvo variados y muy debatidos nombres en danza.
Finalmente, el Centro Cultural Kirchner será rebautizado, dentro de pocos días, como Centro Cultural Domingo Faustino Sarmiento, en el renovado edificio de Correos, también renombrado como Palacio Libertad.
Sede de la Secretaría de Cultura que encabeza Leonardo Cifelli, y bajo la mirada siempre atenta de Karina Milei, el edificio que fuera emblema de la cultura kirchnerista albergó por estos días actividades infantiles por las vacaciones de invierno, mezcladas con exposiciones de la artista plástica Marta Minujín y el “Pochoclo Sinfónico”, música de películas a cargo de la orquesta de la Fuerza Aérea. Eventos tal vez algo diferentes a los programados durante los distintos gobiernos kirchneristas.
Otras opciones de nombres, como los del actor Alfredo Alcón o el músico de tango Astor Piazzolla, fueron descartadas por no generar consenso y se optó por Sarmiento, el expresidente que supo polemizar arduamente con Juan Bautista Alberdi, uno de los próceres más cercanos al corazón presidencial.
El regreso del embajador de Brasil a Buenos Aires
Algunos comensales se sorprendieron al verlo, luego del revuelo que generó su partida. El embajador de Brasil, Julio Bitelli, fue parte el viernes de los festejos por el día de la Independencia de Perú, en la señorial sede diplomática de ese país, en pleno barrio de Palermo.
Siempre con andar sigiloso pero muy activo, Bitelli había sido llamado “a consultas” por el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva luego del sonado viaje del presidente Javier Milei a Camboriú, donde participó de una cumbre conservadora y se encontró nada menos que con el expresidente Jair Bolsonaro, rival político del líder del PT.
Rodeado por sus pares (estuvieron presentes diplomáticos de EE.UU, México, la Unión Europea, Chile, Paraguay, Costa Rica, Marruecos y Serbia, entre otros), Bitelli conversó un rato con Amador Sánchez Rico, representante de la UE, y degustó los manjares peruanos, mientras escuchaba al embajador de ese país y anfitrión, Carlos Alberto Chocano Burga, enfatizar sobre el vínculo bilateral en su discurso ante los presentes, entre ellos el subsecretario para Asuntos Latinoamericanos de la Cancillería, Mariano Vergara. “Lo tuvieron unos cuantos días allá en Brasilia dando explicaciones”, contó uno de sus interlocutores.
No llegó a cruzarlo Luis Petri, el ministro de Defensa que también participó de la recepción, unos minutos más tarde.
Adorni recibe consejos a distancia de un antecesor
Dueño de un estilo personal que ya se hizo marca registrada a través de sus habituales conferencias de prensa y participaciones polémicas en redes sociales, el portavoz presidencial Manuel Adorni sigue marcando en buena medida la agenda mediática del gobierno de Javier Milei.
Claro que su performance (que algunos ligan a una eventual candidatura a legislador, el año que viene) es seguida de cerca por sus antecesores en el cargo, entre ellos el radical Juan Pablo Baylac, otrora vocero del presidente Fernando de la Rúa en la última etapa de su frustrado paso por el poder.
En los espacios de “rosca” de la política en su ciudad, Bahía Blanca, que suele frecuentar, Baylac se muestra elogioso de su sucesor, al que considera “una buena persona y un buen profesional”, aunque no lo ha tratado demasiado.
De todos modos, no deja de darle consejos a la distancia, como por ejemplo, que deje el modo diario de conferencias de prensa en Balcarce 50. “Es indispensable que regule, porque un vocero no puede gastar las palabras. Debe hacerla 2 o 3 veces por semana. Y aparecer en temas puntuales”, dice Baylac, a modo de paternal recomendación.
“¿Pero no era que no teníamos relaciones de Estado a Estado y sólo nos manejábamos entre privados?”, ironizó uno de los presentes cuando vio entrar al salón del Hotel Sheraton a Sergio Neiffert, jefe de los espías y titular de la resucitada Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
El mediodía del viernes, la embajada de China en Buenos Aires organizó un homenaje por el 97° aniversario de la creación, en 1927, del Ejército Popular de Liberación de China, el gigante asiático donde el Partido Comunista es eje y rector de la vida política y económica del país.
¿Quién gobierna cuando Milei se aburre?
Sin rastros de su jefe político, el asesor todoterreno Santiago Caputo, Neiffert llegó a la celebración militar china junto a algunos colaboradores, como Alejandro Walter Colombo, uno de los cuatro secretarios que tiene el renovado organigrama de la central de inteligencia.
De buen humor, y luego de saludar al embajador Wang Wei, Neiffert conversó con algunos de los invitados, como el secretario de Relaciones Internacionales de Pro, Fulvio Pompeo, o el diputado provincial y exfuncionario bonaerense Fabián Perechodnik.
Nadie quiso contar si los $100.000 millones en fondos reservados, otorgados a la SIDE vía decreto la semana pasada, formaron parte de la conversación. Ajenos a estos diálogos, en otros sectores del salón estaban el excanciller kirchnerista Jorge Taiana, la dirigente del Instituto Patria María del Carmen Alarcón y cuadros del macrismo como Fernando Straface y el exembajador en China, Diego Guelar.
Sin entrar en polémicas, el embajador Wei habló en su discurso de los puntos en común con la Argentina. “Defendemos juntos la paz y la estabilidad del mundo”, dijo Wei, sin menciones al conflicto derivado por las críticas del embajador norteamericano Marc Stanley a la base aeroespacial china en Neuquén, como tampoco a las declaraciones de la canciller Diana Mondino –”los chinos son todos iguales”– o la controversia por el swap de monedas, que Beijing finalmente renovó con la Argentina, sin solicitarle al Gobierno un desembolso que hubiera desequilibrado sus cuentas.
Hombre de las filas del exintendente de Malvinas Argentinas Jesús Cariglino, Neiffert escuchó también al embajador chino afirmar sobre China y la Argentina: “Hemos venido trabajando juntos y hemos tenido una estrecha colaboración en los foros internacionales”. Wei también anticipó que en los próximos años se dará una “profundización de la modernización del estilo chino”, con eje en una “política exterior independiente y de paz”.
Luego de escuchar los discursos y los himnos de ambos países, Neiffert dejó el hotel del barrio de Retiro. Su misión había sido cumplida, más allá de que la anunciada visita de Milei a China no pasó, hasta ahora, de un anuncio extraoficial que voceros del Gobierno se empeñaron en sostener, sin avances concretos.
Zamora rockero, la sorpresa que faltaba
Serio y algo incómodo se lo vio al gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, el 9 de julio pasado, en la Casa Histórica de Tucumán, en la que firmó junto a otros mandatarios el denominado Pacto de Mayo, impulsado por el presidente Javier Milei.
Días después, el gobernador que maneja diez votos estratégicos en el Congreso (siete diputados y tres senadores) dejó una imagen opuesta y a la vez sorprendente, jugando de local y haciendo gala de habilidades musicales desconocidas para el gran público.
En efecto, un Zamora subido sin complejos al escenario, con manejo virtuoso de guitarra eléctrica y armónica, fue uno de los puntos altos de la tradicional y popular Marcha de las Cuerdas y Fuelles, fiestas musicales que el gobernador (¿ex?) kirchnerista puso en marcha en sus épocas de intendente de la capital santiagueña, y que se reeditó días atrás.
“¡Me gustas mucho!”, entonó el gobernador, siguiendo al pie de la letra el tema homónimo, del grupo Viejas Locas, en la que su autor, Cristian “Pity” Alvarez, describe de modo desenfadado virtudes corporales de una persona a la que le declara su amor.
“El gober en modo rock”, titula elizabethcor7, la usuaria de TikTok que subió el video, toda una rareza con miles de visitas interesadas en la performance del mandatario, por lo visto con veta artística escondida.
El ex-CCK tendrá (otro) nuevo nombre: Sarmiento
La discusión fue larga, y según cuentan los que la escucharon, tuvo variados y muy debatidos nombres en danza.
Finalmente, el Centro Cultural Kirchner será rebautizado, dentro de pocos días, como Centro Cultural Domingo Faustino Sarmiento, en el renovado edificio de Correos, también renombrado como Palacio Libertad.
Sede de la Secretaría de Cultura que encabeza Leonardo Cifelli, y bajo la mirada siempre atenta de Karina Milei, el edificio que fuera emblema de la cultura kirchnerista albergó por estos días actividades infantiles por las vacaciones de invierno, mezcladas con exposiciones de la artista plástica Marta Minujín y el “Pochoclo Sinfónico”, música de películas a cargo de la orquesta de la Fuerza Aérea. Eventos tal vez algo diferentes a los programados durante los distintos gobiernos kirchneristas.
Otras opciones de nombres, como los del actor Alfredo Alcón o el músico de tango Astor Piazzolla, fueron descartadas por no generar consenso y se optó por Sarmiento, el expresidente que supo polemizar arduamente con Juan Bautista Alberdi, uno de los próceres más cercanos al corazón presidencial.
El regreso del embajador de Brasil a Buenos Aires
Algunos comensales se sorprendieron al verlo, luego del revuelo que generó su partida. El embajador de Brasil, Julio Bitelli, fue parte el viernes de los festejos por el día de la Independencia de Perú, en la señorial sede diplomática de ese país, en pleno barrio de Palermo.
Siempre con andar sigiloso pero muy activo, Bitelli había sido llamado “a consultas” por el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva luego del sonado viaje del presidente Javier Milei a Camboriú, donde participó de una cumbre conservadora y se encontró nada menos que con el expresidente Jair Bolsonaro, rival político del líder del PT.
Rodeado por sus pares (estuvieron presentes diplomáticos de EE.UU, México, la Unión Europea, Chile, Paraguay, Costa Rica, Marruecos y Serbia, entre otros), Bitelli conversó un rato con Amador Sánchez Rico, representante de la UE, y degustó los manjares peruanos, mientras escuchaba al embajador de ese país y anfitrión, Carlos Alberto Chocano Burga, enfatizar sobre el vínculo bilateral en su discurso ante los presentes, entre ellos el subsecretario para Asuntos Latinoamericanos de la Cancillería, Mariano Vergara. “Lo tuvieron unos cuantos días allá en Brasilia dando explicaciones”, contó uno de sus interlocutores.
No llegó a cruzarlo Luis Petri, el ministro de Defensa que también participó de la recepción, unos minutos más tarde.
Adorni recibe consejos a distancia de un antecesor
Dueño de un estilo personal que ya se hizo marca registrada a través de sus habituales conferencias de prensa y participaciones polémicas en redes sociales, el portavoz presidencial Manuel Adorni sigue marcando en buena medida la agenda mediática del gobierno de Javier Milei.
Claro que su performance (que algunos ligan a una eventual candidatura a legislador, el año que viene) es seguida de cerca por sus antecesores en el cargo, entre ellos el radical Juan Pablo Baylac, otrora vocero del presidente Fernando de la Rúa en la última etapa de su frustrado paso por el poder.
En los espacios de “rosca” de la política en su ciudad, Bahía Blanca, que suele frecuentar, Baylac se muestra elogioso de su sucesor, al que considera “una buena persona y un buen profesional”, aunque no lo ha tratado demasiado.
De todos modos, no deja de darle consejos a la distancia, como por ejemplo, que deje el modo diario de conferencias de prensa en Balcarce 50. “Es indispensable que regule, porque un vocero no puede gastar las palabras. Debe hacerla 2 o 3 veces por semana. Y aparecer en temas puntuales”, dice Baylac, a modo de paternal recomendación.
Gerardo Zamora rockero, la sorpresa que faltaba; el ex-CCK tendrá (otro) nuevo nombre: Sarmiento; el regreso del embajador de Brasil a Buenos Aires; Adorni recibe consejos a distancia de un antecesor LA NACION